lunes, 13 de octubre de 2008

La familia Pithecellobium

  • El Yacure (Pithecellobium dulce) es oriundo de América tropical, abarca desde México hasta el norte de Sudamérica; en Venezuela crece silvestre en las regiones cálidas y xerófilas de la Cordillera de la Costa. Se le señala como maleza invasora por sus raíces gemíferas. Es un árbol –a veces arbusto– con hasta 8 metros de alto, de crecimiento rápido y longevidad media. Su copa es globosa y deprimida con follaje menudo y ramas extendidas, con pocas y pequeñas espinas, como otras especies tropicales cierra su follaje durante la noche. Su tronco de textura lisa, es recto o retorcido con bifurcaciones bajas. Posee raíces superficiales y extendidas. Hojas alternas, compuestas con 2 pares de pinnas, folíolulos oblongos u ovados, oblicuos en la base. Flores pequeñas blanco-verdosas en capítulos, pedúnculo corto, cubiertas con pelos blancuzcos y compuestas de 20 a 30 flores. El fruto es una legumbre plana, curvada en forma de espiral de 12 a 15 cm de largo, se abren en ambos lados para liberar las semillas de color negro cubiertas por una pulpa blancuzca. De este género hay otras especies con características similares que a menudo crean confusión por su parecido, lo que hace que los campesinos las identifiquen a todas con el mismo nombre.

  • El Taguapire (Pithecellobium ungis–cati) difiere del P. Dulce en el crecimiento ascendente de sus ramas, hojas de menor tamaño, espinas más escasas y reducidas y flores pequeñas en cabezuelas redondas de color blanco amarillento, las vainas de las semillas al madurar se tornan de color rojo escarlata y se enrosca en un espiral.

  • El Orore (Pithecellobium ligustrinum), conocido tambien con los nombres de Piquirgua, Paují o Ñaure, dependiendo de la región del país, difiere del P. Dulce por sus flores blancas en espigas paniculadas y hojas un poco más grandes.

Experiencias en el campo del bonsái:
Los estilos más apropiados para su entrenamiento son: Informal erguido, Aparaguados, trabajos con dos o más troncos, Libre (Bunjin) y trabajos con rocas. Su reproducción es por semilla y estaca joven. El medio de cultivo más apropiado es la mezcla básica o básica porosa, pH 7. Presenta raíces superficiales de mediano porte, raicillas medianamente numerosas, sensible a cortes y manipulación. Tolera la poda y retoña medianamente rápido, tiende a secar ramas; con podas contínuas se obtiene un copioso follaje y mediana reducción de hojas. Buena cicatrización. Es muy tolerante al alambrado, medianamente flexible y medianamente dócil para lograr la forma, se debe proteger la corteza con rafia para evitar marcas por el alambrado, debido a su rápido crecimiento. Se debe abonar frecuentemente y trasplantar de cada 12 a 24 meses. Requiere de un largo entrenamiento para lograr la proporción y el modelado de sus ramas. Se recolecta con facilidad, con troncos de mediano porte y frecuentemente se le encuentra en forma de matorral bajo, donde varios troncos con intrincadas ramas comparten un mismo sistema de raíces.

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